Rubén Méndez Espinosa
Lo propio de la tutoría es asegurar que coincida cabalmente el interés del que aprende con la capacidad demostrada del que enseña, en una relación dialógica respetuosa; así sucedió en el encuentro entre el grupo de tutores del estado de Guanajuato con maestros, coordinadores de programas educativos, jefes de primaria, telesecundaria, formación continua, tiempo completo, jefes de la dirección de educación indígena y migrante del estado de Nayarit. Todos reunidos para hacer posible que los docentes anfitriones vivieran sus primeras experiencias de aprendizaje en relación tutora, para a través de ella promover y elevar la calidad educativa.
Se puede decir que corre viento a favor del cambio educativo en el estado de Nayarit pues todos los servicios de educación pública incluyendo al Secretario de educación como el Director General de SEPEN coinciden en que el eje de la estrategia de mejora educativa sea la relación tutora.
La falta de un modelo educativo para atender el interés y necesidades específicas de cada estudiante, en grupos donde la heterogeneidad es ineludible, le da a la tutoría la posibilidad de llenar el enorme vacío que ha perpetuado el sistema educativo. Cualquiera que vive una experiencia de aprendizaje en tutoría se da cuenta de ello y así lo expresa una maestra que participó en el evento: “Pensaba que sabía todo de la química, pero con el reto que viví, me di cuenta que no sabía todo; luego mi tutora me dio una actividad donde pude reconocer que no sabía pero también pude aprender algo nuevo… Me doy cuenta que si pudo impactar en mí, por supuesto puede impactar en los docentes y estudiantes de Nayarit”.
El maestro Nicolás Contreras Sánchez, Jefe de Sector de la zona norte del estado, quien fuera Coordinador Estatal de la EIMLE en 2011, expresó que la falta del apoyo institucional y de toda la estructura educativa fue fundamental para que el cambio a través de las relaciones tutoras no pudiera continuar. Sin embargo, ahora se muestra entusiasmado ante los nuevos acuerdos con las autoridades y menciona que es hora de volver a movilizar las estructuras que de alguna manera han sobrevivido sin apoyo de las autoridades.
Durante el intercambio se contó con la presencia del maestro Hernán Manuel Plantillas Sánchez, docente con dieciséis años de servicio en telesecundaria y ahora Supervisor de telesecundaria; quien promueve la tutoría desde el 2008. Hernán y su equipo son maestros que continúan con la tutoría, sin ningún apoyo institucional desde la época del PEMLE, y son un ejemplo de la auténtica insurrección profesional de maestros, ATP y Supervisores. El maestro Hernán comenta que se avecinan épocas favorables para la mejora educativa a partir de las comunidades de aprendizaje y señala que hay mucho por hacer; por ejemplo, a partir de las problemáticas que enfrenta con la movilidad de maestros; menciona que es importante incluir dentro del mapa curricular de las Escuelas Normales y UPN la metodología de la relación tutora, pues así el maestro comenzará desde su etapa formativa el desarrollo de las competencias necesarias para atender grupos multigrado.
El aprendizaje en diálogo es siempre visible, demostrable y compartible, lo que hace de la tutoría el elemento esencial de la comunidad de aprendizaje, porque hace posible que todos puedan enseñar y aprender de todos. En la relación tutora los aprendices y tutores practican la argumentación constante al comunicar lo que han aprendido y explicar cómo lo han hecho, señala Dalila López Salmorán durante la clausura; enfatiza que lo que se gana en las aulas con tutoría tiene que ver con la mejora en la convivencia: un sujeto aprende para ayudar a otro a aprender, no para ganarle y decir que es más, pues eso es lo que provoca tensión, bullying y enemistades en el aula. Si se aprende para ayudar a otro a aprender y si un alumno practica todos los días entender al otro y respetar sus ideas, se gesta y nutre la semilla para mejorar la convivencia. Aprenderá a reflexionar sobre su propio pensamiento, a entenderse a sí mismo y a encontrar el modo de aprender aquello que antes no podía. Lo que se traduce en el ciudadano que todos buscamos para México y el mundo.
La maestra Dalila adelantó cuál será la fórmula que seguirán para la mejora del logro educativo: en primer lugar considerar que la tarea de los equipos técnicos es encontrar temas potentes para desarrollar al máximo las capacidades de los alumnos, generar una estrategia de priorización de la ayuda en aquellas escuelas, grupos y estudiantes que tienen los más bajos resultados y más lo requieren; luego y esencialmente, brindar atención personalizada. Ejemplifica analógicamente, cómo un doctor para diagnosticar lo que un paciente requiere, manda hacer estudios de laboratorio y luego de días, ofrece el tratamiento para mejorar. El maestro tiene que tomar esa decisión de ayuda al estudiante en cuestión de segundos y sin apoyos o análisis de laboratorio, tan sólo con lo que puede ver en su estudiante. Entonces, lo que la tutoría ofrece es el intercambio dialógico para radiografiar el pensamiento del estudiante. Es la atención personal la que da los verdaderos diagnósticos, no las pruebas ni los cuestionarios. El diálogo ofrece la posibilidad de conocer lo que cada alumno necesita. La tutoría ofrece una herramienta con la que el maestro puede identificar esa necesidad y ayudarle con pertinencia y eficacia.
Además, Dalila hizo un llamado a las autoridades para establecer vínculos con el estado de Guanajuato con el fin de aprovechar el camino andado de este equipo para fortalecer el trabajo en Nayarit; con el uso de algunos materiales que han producido como la adecuación curricular, el manual de orientaciones, manual para Supervisores y Directores para gestionar la tutoría. El tren en marcha de la educación no se detiene y es importante sumar esfuerzos para aprovechar los recursos valiosos con que se cuentan y librar la carrera contra el tiempo. Con estos acuerdos, en Nayarit se tejen los primeros hilos de una Red Interestatal de Aprendizaje a favor de la mejora educativa con apoyo en la relación tutora que impulsa la colaboración entre los estados de Nayarit, Guanajuato y Baja California.